Apartamentos en Sant Carles de la Ràpita

Sant Carles de La Ràpita es un municipio tarraconense situado en la comarca del Montsiá, en el entorno del Delta del Ebro. Destaca por la presencia de playas tranquilas, familiares y muy acogedoras; así como por un entorno natural en el que abundan los campos de arroz en la zona norte y las montañas en el oeste. Por todo ello, es un escenario vacacional versátil, muy completo, en el que se pueden realizar un buen número de actividades. Parques, puertos, amaneceres únicos, mercadillos, turismo activo, senderismo, buena comida y playas maravillosas figuran entre las posibilidades disponibles en esta población y sus alrededores. Los aficionados al esoterismo, además, aprovechan su visita para recorrer algunos parajes misteriosos ubicados en las inmediaciones del camping de Los Alfaques, tristemente famoso por un grave accidente acontecido a finales de la década de los setenta.

Qué ver en Sant Carles de la Ràpita

Reservar alojamiento en Sant Carles de La Ràpita es una decisión muy acertada. Cuando se busca una escapada relajante, en un ambiente cuidado y libre de preocupaciones, este destino es excelente. Las playas del Trabucador, Capri, Las Delicias, Punta de la Banya y Garbi figuran entre sus mayores atractivos. Son enclaves poco masificados en los que se disfruta muchísimo del mar, la arena y el buen tiempo. Este es uno de los pueblos costeros más tranquilos de toda la Costa Dorada. En general, ofrece arenales poco profundos en parajes de hermosa naturaleza, por lo que resultan ideales para ir con niños pequeños. Su puerto es el más grande de toda la zona y, en su seno, destaca el edificio de la Lonja, donde resulta interesante presenciar la compraventa de pescado. Otro imán para turistas son los miradores de la localidad, como el de la Guardiola, situado en lo alto del monte de La Torreta. Fuera del municipio, es buena idea subir a La Foradada, el mejor mirador de todo el Delta del Ebro.

Qué hacer en Sant Carles de la Ràpita

La actividad, la diversión y los planes variados están garantizados durante tu alojamiento en Sant Carles de La Ràpita. Instalarse en un apartamento, una casa rural o una villa es sinónimo de acceso a muchos entretenimientos. El primero de ellos, tan sencillo como encantador, es disfrutar del paseo marítimo, entre una refrescante sucesión de pinos y viviendas. Los aficionados a las excursiones marinas tienen a su disposición la ruta de las mejilloneras, que se realiza en embarcaciones especiales y permite visitar estas curiosas construcciones dedicadas a la cría y el cultivo de los mejillones. También cabe la posibilidad de llevar a cabo esta visita en paddle surf, aunque exige tener cierta experiencia en estas tablas. Explorar el Delta del Ebro es otro de los grandes planes disponibles, recomendable sobre todo para los amantes de las aves, quienes encontrarán garzas y flamencos en estado puro. Los paisajes naturales preciosos se suceden en la desembocadura del río Ebro. Por último, las excursiones a pueblos turísticos próximos tan carismáticos como Benicasim, Vinaroz o Peñíscola no suelen defraudar en estas vacaciones.

Donde dormir

Alojarse en Sant Carles de La Ràpita permite acceder a una buena cantidad de alternativas. Si bien es una población hotelera y con campings, cada vez es más frecuente la llegada de viajeros que prefieren asegurarse un alojamiento que les otorgue más autonomía, entre otras ventajas. Así, el estupendo surtido de villas ofrece disfrutar de chalés con zonas privadas de alto standing, por lo que resultan fabulosas para los grupos de turistas, ya sean familias o amigos. También una casa rural en Sant Carles de la Ràpita es una opción recomendable, pues en ellas se sienten mucho más la cultura y la esencia de esta localidad. Por último, un apartamento siempre aporta confort, libertad de maniobra y adecuación a las auténticas necesidades. Este municipio es, sin lugar a dudas, un campamento base perfecto para explorar la zona.

Transporte

Existen un buen número de alternativas de transporte público o privado que llegan con frecuencia a Sant Carles de La Ràpita. Es el caso, entre otras, de las líneas de autobús L1010, L1620 y L1623. La estación de buses de esta localidad se encuentra a unos 47 minutos andando desde el centro. Estos desplazamientos en autobús proceden de localidades como Tortosa, Alcanar, Amposta, Barcelona y Tarragona. También existe la posibilidad de viajar en tren, aunque la estación se encuentra a 16 kilómetros, en la población vecina de Aldea. En coche, la AP-7 / E-15 conecta este municipio con Tarragona; la distancia es de unos 98 kilómetros, que se recorren en poco más de una hora. Desde Castellón, por la N-340 y la E-15, el recorrido dura casi 100 kilómetros y alcanza la hora y cuarto de viaje.

Otros datos de interés

Pasear por el caso antiguo, en el centro de esta población de 15.000 habitantes, es una experiencia relajante y adictiva. El mercadillo de Sant Carles de La Ràpita es un atractivo muy estimulante para los visitantes. Pone a la venta un gran surtido de productos, desde ropa a cosméticos, artesanía y alimentos de proximidad. Saborear la rica gastronomía autóctona es otra de las grandezas de este viaje. El marisco, y sobre todo el mejillón, figuran entre los placeres culinarios más exquisitos de la localidad. Junto a cada alojamiento siempre hay una buena cantidad de restaurantes riquísimos. Seguro que cerca del apartamento, la casa rural o la villa hay al menos un par de buenas opciones. Arroces, carnes a la brasa, anguilas, pato y alcachofas destacan también en la gastronomía local.